A medio camino entre Madrid, Segovia y Guadalajara se encuentra Montejo de la Sierra, uno de los pueblos más populares de la Sierra Norte por su famoso Hayedo, declarado en 1974 Sitio Natural de Interés Nacional, el cual atrae a cientos de turistas cada año. Pero no solo este mágico bosque es su único lugar de interés, pues también destaca por un entorno privilegiado de extensas praderas, una exuberante vegetación y estampas montañosas.
Una combinación de paisajes naturales que enamora nada más verla. Por eso, Montejo de la Sierra es un destino propicio para todo aquel que desee hacer una escapada rural, ya sea con los amigos, la familia, la pareja o en solitario porque aquí no encontrarás un momento de aburrimiento.
Situación de Montejo de la Sierra
Esta localidad está en el extremo septentrional y oriental de la Comunidad de Madrid, justo en la frontera con la provincia de Guadalajara y muy cerca de Segovia. Se halla enclavada en las faldas de las montañas de Somosierra, en plena Sierra del Rincón, catalogada como Reserva de la Biosfera por la Unesco. Su núcleo urbano se halla a una altitud de 1.151 metros sobre el nivel del mar, pero rebasa los 2.000 metros en el llamado Coto de Montejo, y el río Jarama nace en este término municipal y discurre por su límite noroeste.
Para llegar es necesario tomar la autovía A-1 hasta Buitrago de Lozoya y una vez alcanzado este pueblo coger el desvío a la derecha hacia Gandullas. La carretera continúa atravesando Prádena del Rincón para seguir unos escasos dos kilómetros hasta arribar a Montejo de la Sierra.
Algo de historia de Montejo
Se estima que Montejo de la Sierra no apareció hasta finales del siglo XI cuando ganaderos de Robregordo, Somosierra y Colladillo se fueron asentando en la zona en busca de nuevos pastos para sus animales. Ya en el siglo XV Montejo estaba integrado en el señorío de Buitrago, dominado por la familia de los Mendoza, que además compró el monte de El Chaparral, donde actualmente está el Hayedo.
En la antigüedad su motor económico fue la ganadería y la agricultura, pero con el fin del régimen señorial y las desamortizaciones Montejo tuvo que dejar atrás el sector primario y se especializó en la elaboración de telares y harina. Paralelamente, se abrieron dos minas de plata y otra de carbón.
Hasta 1833 perteneció a la provincia de Guadalajara, pero con la nueva división territorial impulsada por Javier de Burgos pasó a incorporarse a la de Madrid. Hoy en día cuenta con algo más de 350 habitantes y se ha convertido en una elección predilecta para los senderistas, los amantes de la naturaleza y todos los que buscan un lugar apartado de la gran ciudad donde relajarse y reconectar con la madre tierra.
¿Qué ver en Montejo de la Sierra?
El pueblo de Montejo tiene varios enclaves históricos y pintorescos lugares que el turista no puede perderse:
- La iglesia de San Pedro In Cathedra. Situado en el centro de la localidad y al lado de la plaza Mayor y el Ayuntamiento, este monasterio es la iglesia parroquial de Montejo Está dedicado al Apóstol San Pedro y fue edificado en estilo Barroco entre los siglos XVI y XVIII. También cabe apreciar las pinturas renacentistas existentes en su techo y los dos retablos de la nave Norte: uno al Cristo Crucificado y otro a la Virgen de los Dolores.
- Fuente de los Tres Caños. Se trata de una fuente con tres caños construida en el siglo XIX por la que mana agua pura procedente de la montaña. Está en la plaza Mayor, también conocida como la plaza de la Fuente, y fue inaugurada por Clara Campoamor en 1927.
- Ermita de la Soledad. Es una pequeña capilla del XVI donde se guarda una imagen de la Virgen Dolorosa que sostiene a su hijo muerto sobre las rodillas.
- Fuente del Arriero. Frente a la fachada oeste de la iglesia se abre una calleja y al fondo se halla la antigua Fuente del Arriero, un pilón cubierto por un arco de medio punto realizado con sillares de piedra. No se sabe el motivo de su nombre y se surte del manantial de un prado cercano que se conoce como la Fuente del Arca.
- Toril. Es un establo en el que antaño se guardaba al único toro encargado de cubrir a las vacas del pueblo. Es de planta cuadrada y tiene una cubierta a dos aguas y muros de mampostería con refuerzos de sillares en las esquinas. Se puede ver junto a la calle de la Soledad y a su vera se extendía el Prado del Concejo, un espacio en el que se encerraba a los animales que hubieran dañado las fincas y los sembrados de otros propietarios hasta que sus dueños pagasen los perjuicios causados.
- Horno suspendido. En una de las paredes del callejón del Turco sobresale un horno de cocina a media altura. Es uno de los pocos hornos de este tipo que perduran en la comarca y está hecho de adobe y mampostería, sirviendo tanto para reunir a la familia como para cocer pan y otros alimentos.
El Hayedo de Montejo, una joya natural
Pero la joya de la corona de Montejo de la Sierra es su Hayedo, que en 2017 fue registrado como Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco. Y es que estamos hablando de un bosque excepcional que atesora su propio microclima al conjugarse una serie de factores muy concretos: humedad, sombra, composición del suelo… Lo que ha incentivado la existencia de uno de los hayedos más meridionales de Europa y el único de la Comunidad Autónoma de Madrid.
Este lugar propone imágenes que parecen sacadas de una película de cuento de hadas, ocupa unas 222 hectáreas, por lo que es un bosque pequeño, y en él habitan hayas de más de 20 metros de altura, robles, cerezos silvestres, avellanos, abedules, acebos… que a su vez son el hogar de numerosas especies protegidas como la garduña, el gato montés, el azor, el águila calzada o el mirlo acuático. Conjuntamente, aquí conviven hasta 95 tipos distintos de mariposas.
Por otro lado, es un sitio encantador para los aficionados a la fotografía, ya que con la llegada de cada estación el Hayedo adquiere tonalidades diferentes, pero todas extremadamente llamativas y bonitas. En verano y primavera resaltan sus colores vivos y frescos. En invierno el marrón de los troncos y el verdor de su terreno contrastan con la blancura de la nieve. Pero la palma se la lleva el otoño, cuando las hojas toman tonos rojizos y amarillentos y forman una alfombra en el suelo que es capaz de crear un paraje de ensueño y misterio.
Rutas por el Hayedo de Montejo
Acceder al Hayedo es gratuito, pero es indispensable una acreditación previa. Esto es debido a la necesidad de preservar su conservación natural. La entrada puede conseguirse únicamente online en la página web www.sierradelrincon.org. Asimismo, también es recomendable visitar el Centro de Educación Ambiental Hayedo de Montejo de la Sierra, donde se explica su historia y sus mayores características, y, para descansar, el área recreativa a la entrada del Hayedo.
Los que quieran descubrir el Hayedo pueden hacerlo por medio de tres rutas guiadas de senderismo:
- Senda del Río. Discurre en paralelo al río Jarama y es la más sencilla de realizar con la familia, niños y personas mayores, así como para los que visitan por primera vez el Hayedo, ya que permite la observación de la mayoría de sus ambientes: su bosque adehesado de melojo, su bosque mixto de melojo y haya, su vegetación asociada al río, sus zonas de matorrales…
- Senda de la Ladera. Con una dificultad media y una duración de una hora y 45 minutos, esta travesía transcurre por la ribera del río para luego ascender por la ladera en un tramo circular y manchas de fustal de hayedo, de bosque de melojo y hayedo y laderas de solana con abundante matorral.
- Senda del Mirador. De la misma dificultad y duración que el anterior, este itinerario revela al senderista todos los tipos de vegetación que constituyen el Hayedo. Es el más interesante para los que ya hayan visitado el bosque porque su trazado y temática difieren del resto, de carácter más general. Y los aficionados a la fotografía podrán efectuar increíbles instantáneas de la cuenca alta del Jarama gracias a su parada en un espectacular mirador.
Otras rutas de senderismo por Montejo
Aparte de las del Hayedo, los amigos de las caminatas pueden recorrer parte de la Sierra Norte de Madrid desde Montejo de la Sierra de la mano de varias rutas de senderismo de dificultad baja:
- Ruta por el Camino Viejo a Horcajuelo y las Huertas. De recorrido circular, discurre entre huertos y prados de siega por el antiguo camino que unía Montejo con Horcajuelo, aunque no termina en esta localidad. Tiene una duración de poco más de una hora y está señalizada por balizas con flechas amarillas.
- Ruta de la Ermita de la Soledad a la de Nazaret. Sale desde la Ermita de la Soledad y cruza antiguos prados de siega hasta llegar a lo alto de una loma, donde descansa la Ermita de Nuestra Señora de Nazaret. Se hace en dos horas y 15 minutos y se puede seguir por sus balizas con flechas rojas.
- Ruta por la Dehesa Boyal. Dicha senda fluye por el interior de la dehesa boyal de Montejo de la Sierra y en la Peña de los Balagares te maravillarás con las formas de las rocas que el viento y la lluvia han ido moldeando con el paso de los siglos. Se puede completar en una hora y 45 minutos y solo hay que continuar el recorrido marcado por balizas con flechas azules.
¿Dónde comer en Montejo de la Sierra?
Tras estos paseos, el cuerpo pide reponer fuerzas y para ello en Montejo de la Sierra puedes elegir entre varios restaurantes. Una de esas opciones es el Mesón El Hayedo, en la calle del Turco 13, un pintoresco asador instalado en una construcción típica de la zona que sirve platos de comida casera. Y si el tiempo acompaña, lo mejor es comer fuera disfrutando de sus grandes panorámicas.
Otra posibilidad es el Restaurante Monte del Tejo, en la calle Pozo 23-25, que destaca por sus abundantes raciones y sus enormes cachopos. Si te gusta mucho el arroz debes ir al Restaurante Los Naranjos, en la calle Real 19, ya que es un local especializado en la cocina valenciana que cuenta con 17 platos de arroz: arroz caldoso, arroz “al forn”, arroz con cigalas y chipirón, paella valenciana, paella de marisco, arroz negro, caldero de bogavante, arroz con zamburiñas y gamba roja de Denia…
Apartamentos en Montejo de la Sierra
Ya para terminar la jornada, desde El Bulín te proponemos cinco apartamentos de lujo en Montejo de la Sierra para que descanses plácidamente y te levantes con unas preciosas vistas de la Reserva de la Biosfera. Todos nuestros apartamentos disponen de calefacción central, televisión de 43 pulgadas, colchones viscoelásticos y acceso a Internet por fibra óptica.
- Estudio Biosfera. Si vas con tu pareja, el Estudio Biosfera es un romántico apartamento de elegante decoración mezcla de estilos vintage y moderno con una chimenea y una bañera de estilo Victoriano de dos plazas en medio del salón y al lado de la ventana.
- Estudio Vistas. Otra opción para los enamorados es el Estudio Vistas, una exquisita habitación entre moderna y vintage provista de chimenea y una bañera exenta estilo Victoriano de dos plazas al lado de la ventana con panorámicas a la Reserva de la Biosfera.
- Apartamento Rural Mirador. También para parejas, el Apartamento Rural Mirador tiene un dormitorio con cama de matrimonio de 1,50 metros y bañera exenta estilo Victoriano de dos plazas justo al lado de la ventana y un living comedor con chimenea. Se diferencia de los otros dos estudios por su amplia terraza amueblada con vistas a la Reserva de la Biosfera.
- Apartamento Rural Hayedo. Ya con dos dormitorios, el Apartamento Rural Hayedo es un piso con privilegiadas perspectivas de la Reserva de la Biosfera y con entrada por rampa y adaptado para minusválidos. También tiene una bañera exenta estilo Victoriano de dos plazas, un living comedor con chimenea, una cocina totalmente equipada y un baño adaptado para minusválidos con ducha.
- Apartamento Rural Montejo. Dotado de unas extraordinarias panorámicas, el Apartamento Rural Montejo dispone de dos dormitorios, uno de ellos con cama de matrimonio y bañera exenta estilo Victoriano de dos plazas, un living comedor con chimenea y sofá cama doble, y una bonita terraza con hamaca nido, mesa y sillas de exterior.
Así que ya sabes, Montejo de la Sierra te espera con los brazos abiertos. Ahora solo tienes que mirar la disponibilidad de nuestros apartamentos y hacer la maleta. El resto déjaselo a Montejo de la Sierra y sus posibilidades de relax, turismo rural, deporte al aire libre y gastronomía.